
Los léntigos solares, pecas, manchas café con leche, algunos nevus y otras lesiones se eliminan fácilmente ya sea con Láser o con Luz Intensa Pulsada y habitualmente se realizan con anestesia local o tópica.
Según el tipo de lesión o del método utilizado para eliminarla se precisan una o mas sesiones y en cualquier caso es preciso es preciso usar una fotoprotección adecuada tras el tratamiento.
Es preferible realizar estos tratamientos en épocas poco soleadas como el invierno.
Para las lesiones más comunes bastan una o dos sesiones, mientras que para las más profundas puede ser necesario alguna sesión adicional.
El láser Q-switched produce una sensación de quemazón en la zona de aplicación perfectamente soportable. No obstante para minimizar las molestias, aplicamos un anestésico tópico en forma de crema.
Las lesiones pigmentadas especialmente los lentigos solares tienen tendencia a la recidiva, sobre todo si mantenemos la exposición solar. Para evitarlo es preciso tras el tratamiento una fotoprotección adecuada.
Normalmente aplicamos una crema antibiótica recién terminado el tratamiento que debe seguir utilizándose durante unos días. Es posible ducharse al día siguiente, cuidando de no frotarla zona tratada.
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